Café de Cuba

Aplican biogás en Granma, Cuba

Por Luis Morales Blanco
Foto Rafael Martínez Arias

Las despulpadoras de café pueden crear problemas ambientales en las montañas pues los residuales provenientes de estas labores por lo general, contaminan las fuentes de agua potable o para la agricultura e industria.

Esa fue la chispa que estimuló la inventiva del ingeniero civil Hipólito Oviedo Hernández, especialista de la Empresa de Café de Bartolomé Masó (en las estribaciones de la Sierra Maestra) en el sursuroeste de la provincia cubana de Granma.

Oviedo encaminó sus estudios al empleo de la cáscara del grano para lograr biogás y utilizarlo en labores domésticas o institucionales y a la vez disminuir la carga contaminante: “Quisimos trazar soluciones para nuestros intereses y los de cualquiera que afronte un caso similar, resulta importante calcular qué digestor resulta más conveniente y actuar en consecuencia”, expresa.

Como ejemplo cita la despulpadora de Frío de Nagua (paraje montañoso en dirección sursureste desde Bartolomé Masó) la cual aporta unas dos toneladas de cáscara como elemento contaminante y unos 800 litros de residuales líquidos.

“Constituye una especie de mosto que al derramarse compromete la vida vegetal y animal del medio acuático, inicialmente allí es recogido en una serie de lagunas sépticas, pero con las crecidas de los ríos va a parar a ríos y arroyos… mediante un digestor apropiado pudimos eliminarlo”.

Oviedo cita algunos derivados: “…Biocarbono de alta calidad, utilizado ampliamente para la alimentación de la lombricultura, de la cual a su vez puede obtenerse un elevado número de subproductos, descuella la harina de lombriz, de alto contenido proteico, destinada al sustento animal.

“Otras ventajas radican en la iluminación –indica- mediante la combustión, el gas permite el montaje de lámparas, también en los motores de combustión interna para mover las despulpadoras, esto significa una reserva en divisas, aprovechada en el mejoramiento de las condiciones de vida del trabajador, de la comunidad, porque el biogás en sentido general aporta múltiples beneficios…”

“En la actualidad en Bartolomé Masó están montados varios digestores con ahorro sustancial de keroseno y electricidad a los usuarios. En la Ciudad Escolar Camilo Cienfuegos (primera gran obra educacional construida por la Revolución) tenemos un proyecto internacional de solarización devenido génesis del Grupo comunitario para el desarrollo del biogás, estamos enfrascados en la construcción de 10 digestores; pretendemos finalizarlos en el segundo semestre del año entrante.

En la unidad 8 de la Ciudad Escolar un módulo pecuario remodelado a partir del proyecto ofrece salida adecuada a sus residuales, construimos otro de 48 metros cúbicos, a un 75 por ciento de ejecución, y otro en explotación de nueve, el mayor servirá como almacén de gas destinado a la cocción de alimentos de un alto porcentaje de los 800 alumnos del centro.

“Montaremos 10 de uso doméstico con financiamiento planificado, cada uno con un responsable para su mantenimiento, fueron escogidos vecinos poseedores de ganado vacuno, caballar, ovino-caprino y porcino como solución a los residuales generados por esos animales, colateralmente recibirán el gas como beneficio, de entrada son eliminados parásitos, insectos dañinos y se garantiza la higiene ambiental.

El trabajo Biogás en la era moderna, de la coautoría de Oviedo y Vicente Macías Domínguez, recibió mención en el II encuentro Nacional de Economía Agropecuaria de Montaña, por sus múltiples valores en el campo de la disminución de carga contaminante.

http://www.lademajagua.co.cu/infgran7534.htm