martes, 4 de diciembre de 2007

Café de México

Falta capacitación para los productores de café

El Gobierno del Estado apoyará a los productores de café con la rehabilitación de los caminos saca cosechas

El café para los nayaritas forma parte integral del desayuno. El secreto para producir café de calidad es simple: trabajo. Esto lo saben bien los productores de café del estado quienes durante años han enfrentado innumerables problemáticas para producir y comercializar sus cosechas.

De acuerdo con los productores de café del poblado de Viscarra, municipio de Compostela, entre las dificultades a las que se enfrentan, se pueden señalar las siguientes: tienen necesidad de capacitación, además manifestaron necesitar de manera prioritaria asistencia técnica, de la misma manera declararon tener problemas de comercialización e indicaron tener problemas de financiamiento.

Sin embargo, uno de los problemas más urgentes, es la reparación de sus caminos saca cosechas, los cuales no han sido reparados en más de tres años, por lo que actualmente son intransitables, pues en algunos de ellos hay zanjas de hasta tres metros de profundidad.

“El año pasado la producción de café fue muy poquita y pudimos sacarla en las remudas, pero ahora parece ser que la cosecha será muy buena, el problema es que si no se reparan los caminos antes durante este mes, no podremos sacar todo nuestro producto porque los vehículos no pueden entrar y los que se han arriesgado hacerlo, han tenido muchas dificultades con sus vehículos”, dijo Juan Ulloa, Comisariado Ejidal de Viscarra.

Quien explicó que los cafetales se planifican con rigidez técnica. En vez de plantar las semillas en el campo, se cultivan los pies en semilleros en los que se les resguarda de la luz. Unos 40 días después de plantarlos, germinan los granos de café. Después de un año de tratamiento cuidadoso en el vivero, se replantan los pies en el exterior.

A fin de ser fructífero, el cafeto requiere cuidados constantes todo el año, entre ellos la eliminación de la mala hierba, que le roba los nutrientes del terreno, y la aplicación periódica de fungicidas e insecticidas para protegerlo de parásitos como la broca y enfermedades como la roya.

Las plantas jóvenes tardan un mínimo de dos años en fructificar. Con la cosecha aumentan significativamente las labores. Lo ideal es recoger a mano, una a una, solo las cerezas maduras.

Además de dichas problemáticas, los productores de café tienen una lucha incesante contra los insectos y las enfermedades de la planta. Cierto hongo ataca las hojas y puede matar el árbol. Algunos gusanos arruinan los granos abriéndoles agujeros al comer de ellos. Por supuesto, hay fungicidas e insecticidas eficaces, pero el uso constante de éstos aumenta el costo de la producción.

“El producir café no es negocio, solamente da para poder vivir al día, es por eso que necesitamos siempre el apoyo del gobierno. Es por eso que ahora nos dicen que debemos darle valor agregado al café, no solo vender el grano, pero para eso se necesita maquinaria y capacitación, algo en lo que, según dice el gobierno, nos ayudarán”, comentó Marcelino Diaro, productor de café por varias décadas.

Finalmente se ha notado, por ejemplo, que la ceniza del café constituye un buen abono. También, se han elaborado del café desinfectantes y aislamiento para paredes, pisos y techos. Se puede producir glicerina del aceite de café, y el aceite de café se puede usar en pinturas, jabones y muchísimos otros productos.



http://www.enfoqueinformativo.com/note.asp?note=54437

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