Revaluación amarga la bonanza
Los buenos precios externos del café no han generado mayores ingresos a los caficultores por la caída del dólar. Se han esfumado $2 billones
Los caficultores no han podido saborear los buenos precios internacionales del café. Y es que desde hace un año se enfrentan a una plaga, quizás peor que la roya o la broca: la revaluación del peso.
Tal es su efecto nocivo, que los cafeteros han dejado de percibir en los últimos tres años cerca de $2 billones
Este panorama es para los caficultores una total paradoja. Son tan buenos los precios del café, que al día de hoy el grano logró la mejor cotización de los últimos diez años, de US$1,62 por libra en la Bolsa de Nueva York. All comienzo de este año, su precio era de US$1,41.
Entre tanto, el dólar ha perdido en lo que va corrido de este año $118,91 y por tanto ha afectado los ingresos de los exportadores cafeteros.
“La devastadora revaluación le ha quitado al caficultor la ilusión de la mejoría de precios del grano a nivel internacional, robándosela por la vía de una tasa de cambio cada vez más baja y menos remunerativa”, dice Gabriel Silva, gerente de la Federación Nacional de Cafeteros.
“Es que una cotización US$1,60 o más no lo imaginábamos dentro del pesimismo que le ha llegado al gremio. Los cafeteros sufren porque a pesar de una magnifica cosecha y un buen precio fueron muy pocos los que ganaron, entonces la situación tiene sabor agridulce”, explica Mario Gómez Estrada, miembro del Comité Nacional de Cafeteros.
Por su parte, Juan Camilo Restrepo, presidente del Comité, dice que esta coyuntura de precios altos debe mirarse con cautela, porque las cuentas cafeteras siguen arrastrando factores negativos como los elevados precios de los fertilizantes y el encarecimiento de la mano de obra.
“El caficultor ya no está trabajando a pérdida, pero es claro que durante 10 años, el sector sufrió por los precios internacionales y ahora no puede disfrutar de ellos por la revaluación”, anota Restrepo.
Héctor Fabio Cuéllar, director ejecutivo del Comité de Cafeteros del Valle, asegura que “a todos los que abastecemos mercados externos, la revaluación nos ha pegado fuerte”.
Y para tratar de tener menos pérdidas, los cultivadores del grano de la región aumentan la productividad y reducen los costos de producción.
Algunas de las acciones están encaminadas a producir cafés orgánicos, marcados con sellos verdes, que se puedan posicionar en los mercados internacionales con mayores precios.
Por ahora, los caficultores a una sola voz aseguran que la revaluación es la plaga más dura que los ha atacado durante toda su historia.
Cifras
http://www.elpais.com.co/paisonline/notas/Febrero222008/eco03.html
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